lunes, 3 de noviembre de 2014

SESION 108





















2 comentarios:

  1. En primer lugar hablaremos de la interpretación, la cual tiene como objeto conocer y entender el significado de cualquier entidad susceptible de conocimiento o dotar de sentido a un conjunto de símbolos. En el ámbito del derecho, nos podemos referir a textos problemáticos que tienen un sentido dudoso y necesitan una aclaración. Ello nos lleva a lo siguiente: ¿se interpreta para crear? o ¿se interpreta para descubrir? La respuesta a estas preguntas es los que nos llevará a la teoría de la argumentación jurídica con la que estemos de acuerdo.

    Por otra parte, si bien es cierto, lo ideal es que el sujeto cognoscente suspenda sus juicios al estudiar su objeto de conocimiento, lo cierto es que una interpretación indudablemente partirá de las preconcepciones de dicho sujeto, por lo que pueden existir un número infinito de interpretaciones pues este será en función del número de sujetos cognoscentes que aprecien el mismo fenómeno o conjunto de signos. En consecuencia, la interpretación puede ser vista desde diferentes áreas del conocimiento.

    Se han identificado tres principales tipos de problemas interpretativos: laguna, antinomia e indeterminación. La laguna se refiere a la ausencia de normatividad, la antinomia se refiere a que una misma norma puede tener varios significados incompatibles entre sí, y la indeterminación se refiere al significado con el que hay que entender un enunciado normativo.

    Para resolver los problemas de interpretación, se han creado diversos métodos, sin embargo, el método a utilizar dependerán de la forma en que se conteste a las preguntas: ¿qué es interpretar?, ¿por qué y para qué se interpreta?

    Entonces, ¿qué relación tiene la interpretación con la argumentación? La argumentación implica necesariamente un entendimiento de las premisas normativas, es decir, dotar de un significado a misma, en relación con el hecho, lo que nos llevará a dar un sentido a las conclusiones.

    En consecuencia, el ejercicio de la argumentación lo podemos encontrar tanto en los casos fáciles, difíciles y críticos. En el primer caso nos encontramos ante la simple subsunción del caso concreto a la norma hipotética. Pero en el caso de los segundos se complica la aplicación de la norma, ya que sea cual sea la conclusión, siempre habrá una pérdida o menoscabo a otro principio.

    Es por ellos que la argumentación consiste en dar razones a favor de lo que se dice, para tratar de justificar nuestra decisión, no sólo para persuadir o convencer, como lo es el caso de la retórica.

    ResponderEliminar
  2. el tema de argumentación e interpretación es gran es de gran importancia, sobre todo porque la argumentación es la base fundamental para un abogado, éste mediante la argumentación podrá convencer al juzgador de que es él quien tiene la razón.
    Para un abogado depende de su argumentación para que su patrocinado pueda tener una sentencia favorable: si es inocente será absuelto, si es culpable bajar al mínimo la pena.

    ResponderEliminar